viernes, 27 de abril de 2018

REFLEXIÓN 77. ¡EVOLUCIÓN DE LOS RITOS A LOS SACRAMENTOS EN LA ERA CRISTIANA!


 ¿QUÉ DIFERENCIA HAY ENTRE UN RITO Y UN SACRAMENTO? ¿ES AUN NECESARIO, EL SACERDOCIO EN EL NUEVO TESTAMENTO? 

1.- EN EL BAUTISMO. 
El bautismo es el primer rito con que se encuentra el lector del registro evangélico. Era practicado por Juan el Bautista y por los discípulos, por instrucción de Jesucristo, quien también fue bautizado. Los apóstoles bautizaron posteriormente en cumplimiento de la gran comisión evangélica. Pero el bautismo tiene una historia aún más antigua. Los que eran sometidos por los sacerdotes a un régimen de purificación, eran bañados. En los días posteriores del judaísmo, esas abluciones eran, por lo menos, cumplidas por inmersión (ver Mishnah Mikwaoth). También los prosélitos ganados para la fe judía pasaban por un bautismo por inmersión cuando se incorporaban a la comunidad de los israelitas. 

Los esenios parece que también daban importancia a los lavamientos ceremoniales. Por lo tanto, cuando Juan el Bautista se presentó predicando su mensaje de arrepentimiento, 45 era natural que ofreciera una ceremonia de lavamiento a los que respondían a su mensaje. Mucha de su predicación la hizo en zonas rurales, en el "desierto", donde vivía poca gente. Cuando las personas iban a Juan arrepentidos y confesando sus pecados, él las llevaba al Jordán. Jesús mismo se sometió al bautismo a manos de su primo Juan, no en arrepentimiento por sus propios pecados, pues no los tenía, sino en relación con su obra como Redentor. Lo hizo para cumplir con "toda justicia" (Mat. 3: 15), para dar cada paso de la vida cristiana, no para su propia salvación sino para el mundo.

 Al participar Jesús de ese rito, dio a sus seguidores un ejemplo, y al mismo tiempo en su propia persona unió el rito con la verdad de la salvación. Aquí también, por primera vez, el don del Espíritu Santo acompañó al rito del bautismo. Jesús mismo no bautizaba después de comenzar su obra pública; sus discípulos oficiaban en ese rito. El bautismo llegó a ser una práctica general en la iglesia cristiana, y ha continuado siendo el medio de iniciar a los miembros nuevos al entrar a la iglesia, ya sea en la infancia, o al llegar al uso de razón, o siendo adultos, de acuerdo con las diferentes prácticas de los diversos grupos cristianos. 

*Que el bautismo de Juan no era suficiente para los que se convertían en seguidores completos de Cristo, se demuestra porque Pablo rebautizó a algunos que vinieron a él en Efeso, que sólo habían sido bautizados por el bautismo de Juan y que, como lo descubrió Pablo, no sabían nada del Espíritu Santo. El los instruyó más en el camino del cristianismo, los instruyó acerca del Espíritu Santo, y los rebautizó. En ese momento recibieron el bautismo del Espíritu Santo y hablaron en lenguas (Hech. 19: 1-7). 

NOTA: En Algunos casos, los que no llegaron a entender la doctrina se volvieron a bautizar, como sucede hoy. El problema no era el bautismo; sino el bautizado que no crece y se queda en su primera experiencia. Pero Los Apóstoles no se volvieron a Bautizar, se quedaron solo con el bautismo de Juan).

En la gran comisión que Jesús dio a sus discípulos, les ordenó que bautizaran a los conversos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo; pero con frecuencia se registra el bautismo administrado en el nombre de Jesús, como la figura central de la presentación del plan de salvación. Esto no significa que no se usaba la fórmula bautismal regular de la comisión. Significa sencillamente que se destacaba el nombre de Jesús en la obra del Evangelio. 

*El Bautismo era por Inmersión, y desde los primeros casos, como los bautismos del etíope y de Cornelio en Cesarea, efectuados por Felipe y Pedro respectivamente, era una ceremonia sencilla desprovista de un ritual complicado. En cada caso de bautismo que se registra, se daba instrucción antes de administrar el rito. 

 Sin embargo, no mucho después de la era apostólica se produjeron en la iglesia notables CAMBIOS en el rito del bautismo. NO SÓLO se transformó en toda una ceremonia la administración del bautismo, sino que su significado y aun la forma del rito sufrieron un cambio. 

A mediados del siglo II, el autor de la Didajé escribió que para el bautismo sólo debe usarse agua viva, es decir, que corra; y que si no es posible bautizar en agua en movimiento o en agua detenida, es permitido derramar agua sobre la cabeza del candidato (Didajé 7). Aquí hay un cambio profundo en la comprensión del significado del rito, porque derramar agua nunca puede representar adecuadamente la muerte al hombre viejo de pecado y la resurrección a novedad de vida simbolizadas por la inmersión, como lo enseña Pablo (Rom. 6: 3-4). 

* LA DIDAJÉ también pide una triple inmersión, una añadidura que sin duda se usó desde antiguo en la ceremonia. Tertuliano (c. 225 d. C.) habla de la triple inmersión practicada en sus días como una "señal más amplia" del voto bautismal, y acompaña su afirmación con una descripción de una ceremonia bautismal muy complicada (De Corona 3). En esos mismos tiempos se estaba efectuando un cambio mucho más significativo en la práctica y el significado del bautismo.

 TERTULIANO sostenía a comienzos del siglo III que no había necesidad de bautizar a los párvulos, porque el bautismo no era necesario para su salvación. Prefería un bautismo "cuando han llegado a conocer a Cristo" (De baptismo 18). El hecho de que se opusiera al bautismo de los párvulos, señala que se practicaba en ese tiempo. Orígenes (m. c. 254), contemporáneo más joven de Tertuliano, declaró que el bautizar a los niños era una "tradición de los apóstoles" (Comentario sobre Romanos, v. 9).  

Y CIPRIANO instaba, casi al mismo tiempo, que el bautismo no debía ser negado a un párvulo "que se acerca con más facilidad, por esta misma razón, a la recepción del perdón de pecados; que a él le son perdonados, no sus propios pecados, sino los pecados de otro" (Epístola 58, A Fidus). Este concepto de que el bautismo lava el pecado original heredado de Adán se convirtió, especialmente en el Occidente, en la razón dominante para administrar el rito a los niños. 

*El bautismo llegó a ser considerado como un rito salvador. Se creía que el pecador estaba condenado si no recibía el bautismo.  
De este modo el BAUTISMO se transformó de un sencillo rito simbólico, con un profundo significado interno espiritual, en un SACRAMENTO.* 

*A MEDIDA QUE EL CARGO DEL ANCIANO PRINCIPAL EVOLUCIONABA HACIA UN OBISPADO MONÁRQUICO, el Obispo se fue convirtiendo en el depositario exclusivo del derecho de administrar el bautismo o de autorizar su administración. Al convertirse el hantisísmo en algo sacramental, se acrecentó la autoridad del obispo como si tuviera un poder sobrenatural que no poseían otros cristianos. 

*La Evolución Simultánea De La Cena Del Señor convertida en un rito que implicaba un poder sobrenatural (ver "La Cena del Señor"), también favoreció el desarrollo de la preeminencia del clero. El obispo llegó a ser un instrumento necesario para salvar a los pecadores, sin cuya ministracion no podía haber salvación. Esto significó el restablecimiento del sacerdocio en la iglesia cristiana, apesar de que la institución sacerdotal se había hecho innecesaria con el comienzo del ministerio de Jesucristo como Sumo Sacerdote en el santuario celestial. 

 *DE ESTA MANERA HUBO UNA TRIPLE SUCESIÓN DE ERRORES: (1) La falsa doctrina de la herencia del pecado original; 
(2) la perversión del bautismo al cambiar el rito de una sola inmersión del adulto a una triple aspersión de agua sobre la cabeza de un niño; 
(3) el hecho de dar al bautismo un significado sacramental, y hacer del obispo un sacerdote sacramental: una parodia del plan de salvación, una sustitución del sacerdocio de Cristo y una apostasía de la verdadera senda cristiana. Esta apostasía se convirtió en una realidad en la iglesia afines del siglo III. 

2.- EN LA CENA DEL SEÑOR.  
Una evolución paralela tuvo lugar en el caso de la Cena del Señor. La comida de confraternidad se practicaba tanto entre los judíos como entre los paganos. Se pedía que los hebreos emplearan las ofrendas de paz en una comida tal. La cena pascual era una comida cuyos ingredientes estaban estrictamente prescritos y de ella participaba el grupo familiar, o un grupo de amigos que habían ido juntos a Jerusalén para la fiesta. Cuando se acercaba la última pascua del ministerio de Jesús, él expresó su deseo de comerla con sus discípulos (Luc. 22: 15). Se hicieron los preparativos para tal fin, y la noche del jueves de la semana de la crucifixión, la víspera o comienzo de la parte oscura del 14 de Nisán, Jesús comió la pascua con sus discípulos (ver la 1.ª Nota Adicional de Mat. 26). 

*Probablemente al comienzo de la ceremonia, Jesús lavó los pies de sus discípulos. Luego estableció la Cena del Señor. Tomó el pan sin levadura, plano y delgado, de la cena de la pascua judía, y la copa que contenía el "fruto de la vid" Como los evangelistas invariablemente llaman a la bebida de la cena, y compartió esos elementos de la comida con sus discípulos. De acuerdo con la información proporcionada por el apóstol Pablo (1 Cor. 11: 23-26), Cristo los instruyó para que participaran del pan y del "fruto de la vid" como una representación de su cuerpo herido mortalmente cuando llevó los pecados del mundo, y de la sangre que derramó al morir por los hombres. 

*Esos emblemas deberían anunciar la muerte de Cristo hasta que él volviera por segunda vez. SIN EMBARGO, se introdujeron cambios extraños. Veinticinco años después de la muerte de Jesús puede verse que ya se había convertido en una costumbre, por lo menos en Corinto, que los miembros de la iglesia llevaran a esas reuniones alimento y vino para comer y beber (1 Cor. 11: 20-21). 

Pablo reprendió a los corintios por su exclusivismo y egoísmo manifestados en esos festines. La fiesta que acompañaba a la Cena del Señor era llamada agáp', o fiesta de amor. Judas se refiere a ella (vers. 12) y al mismo tiempo indica que había elementos adversos en la fiesta de amor. 

El reproche de Judas y la crítica de Pablo en cuanto a la fiesta de amor, y quizá el sentimiento cristiano en general acerca de los abusos, sin duda hicieron que esta característica del rito se esfumara de la práctica de la iglesia, y sólo quedara la sencilla Cena del Señor. A comienzos del siglo II se usa en las epístolas de Ignacio (A los filadelfos 4; A los esmirnenses 7-8) la palabra griega EUCARISTÍA, "acción de gracias", para la Cena del Señor. De este vocablo deriva "eucaristía", nombre específico para la Cena del Señor.

 
 *EL RITO DE LA CENA DEL SEÑOR CONTINUÓ EVOLUCIONANDO. 
 En el siglo II la Didajé ya daba el nombre de sacrificio a la Cena del Señor (14), y desde el tiempo de Gregorio de Nisa (In Christi resurrectionem, Oratio I) esta expresión se hace más frecuente. 

*De este modo creció la convicción de que la eucaristía significaba una repetición del sacrificio de Cristo. 

*Adviértase la transición: al comienzo la Cena del Señor fue un servicio de acción de gracias, como lo muestra claramente el término "eucaristía". Era un servicio conmemorativo en el que participaban los que creían que ya habían recibido el don de la salvación, por lo cual manifestaban su gratitud participando de los emblemas prescritos. “Sin embargo, gradualmente y a través de los pasos indicados, la cena se convirtió en un medio de salvación, como una repetición del sacrificio del Señor”. 

*En esta forma la cena, como el bautismo, se convirtió en un rito salvador (Como un fin en sí mismo), y de la misma manera hizo necesario un intercesor para administrarlo como un proceso sacramental. Tanto en la eucaristía como en el bautismo, el obispo era el intercesor oficiante, haciendo de sacerdote en el sentido del Antiguo Testamento o aun casi en el sentido pagano. 

*Este cambio de la Cena del Señor como un RECONOCIMIENTO de la salvación recibida a un ritual realizado como un medio de salvación, y de un servicio de acción de gracias A UN SACRAMENTO, no fue, de ninguna manera, una evolución inocente; fue una apostasía

 *Debido a este cambio, realizado sin autorización ni base bíblica en la interpretación de la naturaleza del bautismo y de la Cena del Señor, un sacerdocio cristiano intercesorio -una verdadera contradicción de términos- llegó a ser una necesidad eclesiástica y sacramental. La ambición de destacarse, siempre presente en el corazón humano, hizo que los hombres que tenían autoridad eclesiástica sintieran intensos deseos de cumplir con esas funciones. El sacerdocio humano en la iglesia cristiana se convirtió en un hecho consumado a mediados del siglo III. CBA MHP

miércoles, 25 de abril de 2018

REFLEXIÓN 76. ¡ROMA Y LOS CRISTIANOS!


¿Por Qué Fueron Perseguidos Los Cristianos,
 Por El Imperio Romano? 

Los factores que ayudaron en la tarea de los apóstoles fueron: un gobierno relativamente estable, un sistema administrativo común, la justicia romana, una ciudadanía que cada vez se otorgaba con más facilidad, la paz preservada por legiones bien disciplinadas los caminos que llegaban hasta cada rincón del mundo entonces conocido, y su idioma -el griego- que se entendía casi en todas partes. 

*Al principio la nueva religión aprovechó su vinculación con el judaísmo. La raza escogida había sido dispersada en muchos lugares del imperio, y sus creencias básicas con el tiempo fueron toleradas por los romanos. 

*El cristianismo, como un desprendimiento de la fe más antigua, compartió esta tolerancia; pero después el judaísmo cayó en desgracia. Los judíos fueron expulsados de Roma durante el reinado de Claudio (Hech. 18: 2), y las vehementes aspiraciones nacionales de ello ocasionaron la rebelión en Palestina y las desastrosas guerras de los años 66-70 d. C., que culminaron con la destrucción de Jerusalén en el año 70 d. C. 

 *Cuando empeoro la situación del judaísmo, la posición del cristianismo se hizo más peligrosa. Era una religión no reconocida legalmente, y sus miembros no estaban amparados por la ley. Cuando surgían dificultades, como cuando Roma fue incendiada en el año 64 d. C., fue fácil echarle la culpa a la comunidad cristiana; y la persecución que sobrevino estableció un terrible precedente que se siguió Fielmente en los años sucesivos. CBA MHP

sábado, 21 de abril de 2018

REFLEXIÓN 75. PUEDE HABER CASOS SIMILARES COMO EL DE PILATOS HOY, ¿QUÉ DESPERDICIAN SU ÚLTIMA OPORTUNIDAD DE SALVACIÓN?


33 Entonces Pilato volvió a entrar en el pretorio, y llamó a Jesús y le dijo: ¿Eres tú el Rey de los judíos? 34 Jesús le respondió: ¿Dices tú esto por ti mismo, o te lo han dicho otros de mí? 35 Pilato le respondió: ¿Soy yo acaso judío? Tu nación, y los principales sacerdotes, te han entregado a mí. ¿Qué has hecho? 36 Respondió Jesús: Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí. 37 Le dijo entonces Pilato: ¿Luego, eres tú rey? Respondió Jesús: Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido, y para esto he venido al mundo, para dar testimonio a la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz. 38 Le dijo Pilato: ¿Qué es la verdad?
 Juan 18:33-38 

*Pilato estaba convencido de que un tenebroso complot había sido tramado para destruir a un hombre inocente 
que estorbaba a los dignatarios judíos.
 Volviéndose a Jesús, preguntó: "¿Eres tú el Rey de los judíos?"
 El Salvador contestó: "Tú lo dices." 
Y mientras hablaba, su semblante se iluminó como si un rayo de sol resplandeciese sobre él. Cuando oyeron su respuesta, Caifás y los que con él estaban invitaron a Pilato a reconocer que Jesús había admitido el crimen que le atribuían. 
Con ruidosos clamores, sacerdotes, escribas y gobernantes exigieron que fuese sentenciado a muerte. A esos clamores se unió la muchedumbre, y el ruido era ensordecedor. 

 *Pilato estaba confuso. Viendo que Jesús no contestaba a sus acusadores, le dijo: "¿No respondes algo? Mira de cuántas cosas te acusan. Mas Jesús ni aun con eso respondió." De pie, detrás de Pilato, a la vista de todos los que estaban en el tribunal, Cristo oyó los insultos; pero no contestó una palabra a todas las falsas acusaciones presentadas contra él. 

*Todo su porte daba evidencia de una inocencia consciente. Permanecía inconmovible ante la furia de las olas que venían a golpearle. Era como si una enorme marejada de ira, elevándose siempre más alto, se volcase como las olas del bullicioso océano en derredor suyo, pero sin tocarle. Guardaba silencio, pero su silencio era elocuencia. Era como una luz que resplandeciese del hombre interior al exterior. La actitud de Jesús asombraba a Pilato. 
Se preguntaba: ¿Es indiferente este hombre a lo que está sucediendo porque no se interesa en salvar su vida? 

*Al ver a Jesús soportar los insultos y las burlas sin responder, sentía que no podía ser tan injusto como los clamorosos sacerdotes. Esperando obtener de él la verdad y escapar al tumulto de la muchedumbre, Pilato llevó a Jesús aparte y le volvió a preguntar: " ¿Eres tú el Rey de los Judíos?" Jesús no respondió directamente a esta pregunta. Sabía que675 el Espíritu Santo estaba contendiendo con Pilato, y le dio oportunidad de reconocer su convicción. ¿Dices tú esto de ti mismo --preguntó,-- o te lo han dicho otros de mí?" 

*Es decir, ¿eran las acusaciones de los sacerdotes, o un deseo de recibir luz de Cristo lo que motivaba la pregunta de Pilato? Pilato comprendió lo que quería decir Cristo; pero un sentimiento de orgullo se irguió en su corazón. No quiso reconocer la convicción que se apoderaba de él. 

*"¿Soy yo Judío? --dijo.-- Tu gente, y los pontífices, te han entregado a mí: ¿qué has hecho?" La áurea oportunidad de Pilato había pasado. Sin embargo Jesús no le dejó sin darle algo más de luz. Aunque no contestó directamente la pregunta de Pilato, expuso claramente su propia misión. Le dio a entender que no estaba buscando un trono terrenal. "Mi reino no es de este mundo --dijo:-- si de este mundo fuera mi reino, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los Judíos: ahora, pues, mi reino no es de aquí. 

 *Díjole entonces Pilato: ¿Luego rey eres tú? Respondió Jesús: Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido, y para esto he venido al mundo, para dar testimonio a la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz." (Son como las ovejas que oyen la voz del pastor) (cap. 10: 3, 16). 

*Cristo afirmó que su palabra era en sí misma una llave que abriría el misterio para aquellos que estuviesen preparados para recibirlo. 

 *Esta palabra tenía un poder que la recomendaba, y en ello estribaba el secreto de la difusión de su reino de verdad. Deseaba que Pilato comprendiese que únicamente si recibía y aceptaba la verdad podría reconstruirse su naturaleza arruinada. Pilato deseaba conocer la verdad. Su espíritu estaba confuso. Escuchó ávidamente las palabras del Salvador, y su corazón fue conmovido por un gran anhelo de saber lo que era realmente la verdad y cómo podía obtenerla. 

*"¿Qué cosa es verdad?" preguntó. Pero no esperó la respuesta. El tumulto del exterior le hizo recordar los intereses del momento; porque los sacerdotes estaban pidiendo con clamores una decisión inmediata. EGWDTG 674-675 

 ¿QUÉ ES LA VERDAD? 
*Pilato estaba impresionado por las palabras de Jesús y habría escuchado más instrucciones, pero la turba de afuera clamaba pidiendo una decisión, y Pilato no esperó una respuesta. Con esto menospreció una oportunidad áurea. Al igual que Félix, esperaba una oportunidad más favorable (Hech. 24: 25). Si posteriormente el cielo le concedió otra oportunidad, también fue descuidada como ésta. 

* La turba rápidamente se iba descontrolando y se estaba gestando un motín por el cual Pilato tendría que dar cuenta a sus superiores en Roma (cf. Hech. 19: 40). Pilato comenzó a ver que cada intento que había hecho por conseguir que el pueblo y sus dirigentes dieran su consentimiento para librar a Jesús, sólo había servido para aumentar la furia irracional del pueblo. Se lavó las manos. 

 Con referencia a la estrategia que finalmente llevó a Pilato a hacer esto, ver Juan 19: 12-16. Pilato había declarado repetidas veces que Cristo era inocente, y había procurado soltar a Jesús de ser eso posible. De lo contrario, por lo menos deseaba evadir la responsabilidad de pronunciar una sentencia (Juan 18: 38; etc.). 
 (1) Había intentado persuadir a los Judíos para que ellos mismos se ocuparan del juicio de Jesús, dentro de los límites de la ley (Juan 18: 31). 
  (2) Había enviado a Jesús ante Herodes (Luc. 23: 7).
  (3) Había intentado soltar a Jesús como el preso perdonado en ocasión de la pascua (Juan 18: 39). 
 (4) Había mandado azotar a Jesús con la esperanza de suscitar compasión por él, y así salvarlo de la pena de muerte (Luc. 23: 22). 
 En comparación con otros pueblos de la antigüedad, los romanos eran conocidos por su claro sentido de Injusticia al ocuparse de individuos acusados, actitud que Pilato, sin duda, compartía. 

  Se sabe que el emperador Tiberio trataba con severidad a aquellos funcionarios romanos que maltrataban a cualquiera de sus súbditos. Pilato ya se había hecho acreedor del desagrado imperial por causa de su trato brutal y falto de consideración para con los judíos; por este mismo motivo se lo depuso cinco años más tarde, poco después de lo cual se suicidó (DTG 687; cf. Josefo, Antigüedades xviii. 3. 2; 4. 1-2; etc.). CBADTG MHP

domingo, 15 de abril de 2018

REFLEXIÓN 74. “EL MANDAMIENTO DEL PADRE”


*Cuando Estudiamos La Palabra de Dios, hay más de un contraste sobre distintos temas. Y el siguiente tema no es ajeno a estos contrastes. 

“EL MANDAMIENTO DEL PADRE” 
¿En Qué Consiste El Mandamiento Del Padre, Que Deberían Recibir Y Obedecer Los Judíos, Si Querían Ser Salvos? ¿Será Relevante Este Principio Para Los Cristianos de Hoy?

 “El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero. Porque yo no he hablado por mi propia cuenta; el Padre que me envió, él me dio mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar. Y sé‚ que su mandamiento es vida eterna. Así pues, lo que yo hablo, lo hablo como el Padre me lo ha dicho. 
Juan 12:48-50. 

48. TIENE QUIEN LE JUZGUE.
 Cf. cap. 5: 45. Aquí no es Moisés, sino la palabra de Cristo la que juzga. Los contemporáneos de Jesús quedaban sin excusa pues habían oído de él la verdad acerca de su identidad y misión. No podían aducir ignorancia en cuanto a los requerimientos para la salvación. Si no hubiesen oído la verdad, no hubieran sido considerados responsables (ver com. cap. 9: 39-41). “Así pasa con los que oyen la Palabra de Dios hoy día. ¡Grande es la responsabilidad que Dios coloca sobre los que la oyen! Pueden ridiculizar y aun despreciar los sermones, pero para pesar suyo al fin encontrarán que deben rendir cuenta de lo que han hecho teniendo en cuenta lo que han oído”. 

49. PORQUE NO HE HABLADO POR MI PROPIA CUENTA. 
Al rechazar las palabras de Jesús, los judíos estaban rechazando a Dios el Padre, a quien profesaban adorar. Jesús procuró advertirles acerca de esto. Así también sucede cuando los hombres rehúsan las palabras de los mensajeros del cielo. Rechazan no meramente a los mensajeros sino también a Aquel que les dio su mensaje y los envió (ver com. Mat. 10: 40). 

50. Y SÉ‚ QUE SU MANDAMIENTO ES VIDA ETERNA. 
"Vida eterna" es vida que dura para siempre, vida que no tiene fin. Se hace posible únicamente mediante una conexión ininterrumpida con la Fuente de toda vida. El don de la vida eterna se concretó cuando Dios dio el inefable don de su único Hijo. 
 El cristiano sincero tiene el privilegio de regocijarse en que tiene "vida eterna" ahora, como una dádiva de Dios y "esta vida está en su Hijo" (1Juan 5: 11; cf. cap. 3: 2). 
 "El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene la vida" (1 Juan 5: 12). 

La posesión de la vida eterna depende de que Cristo habite por fe en el corazón. El que cree tiene vida eterna y "ha pasado de muerte a vida" (ver com. Juan 5: 24-25; 6: 54; 8: 51).
*La orden del Padre era que los hombres creyeran en Cristo a quien él había enviado al mundo. Sólo así podían ser salvados (Hech. 4:12). 

En una declaración paralela, Juan afirmó: "Este es su mandamiento: Que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo" (1Juan 3:23). 
 Los judíos creían que recibirían la salvación porque se esforzaban en el estudio y la observancia de la Torah. 
Muchos de ellos depositaban su esperanza de vida eterna en el hecho de ser descendientes de Abrahán. Jesús les advirtió que sólo los que lo aceptaran a él como el Hijo de Dios y como el Salvador del mundo, serían salvados. "Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado" (Juan 17: 3). CBA MHP

sábado, 14 de abril de 2018

REFLEXIÓN 73. ¡VOSOTROS SOIS DIOSES!

 
“Yo Dije: Vosotros Sois Dioses (Elohim), 
Y Todos Vosotros Hijos Del Altísimo” Sal. 82:6. 

¡Somos como Dios, cuando en su nombre, llevamos su palabra, 
¡El Señor Lo Dice; No, El Hombre! 
Pero no independientes como lo creen 
los seguidores de la New Age. 

*Por eso es tan sagrado, que, y cómo predicamos, porque somos representes de Dios, como decía Pablo: “Somos Embajadores de Cristo” 2 Cor. 5:20. 

 ¡Tranquilo, entiendo que esto sacude tu fe, pero leamos los siguientes textos y conceptos!

1Dios está en la reunión de los dioses; En medio de los dioses juzga. 2 ¿Hasta cuándo juzgaréis injustamente, Y aceptaréis las personas de los impíos? Selah 3 Defended al débil y al huérfano; Haced justicia al afligido y al menesteroso. 4 Librad al afligido y al necesitado; Libradlo de mano de los impíos. 5 No saben, no entienden, Andan en tinieblas; Tiemblan todos los cimientos de la tierra. 6 Yo dije: Vosotros sois dioses, Y todos vosotros hijos del Altísimo; 7 Pero como hombres moriréis, Y como cualquiera de los príncipes caeréis. 8 Levántate, oh Dios, juzga la tierra; Porque tú heredarás todas las naciones. Sal. 82. 

“Jehová dijo a Moisés: Mira, yo te he constituido dios para Faraón, y tu hermano Aarón será tu profeta”. Ex. 7. RV60 
“Toma en cuenta —le dijo el Señor a Moisés— que te pongo por Dios ante el faraón. Tu hermano Aarón será tu profeta”. EX. 7. NVI* 

*En algunas ocasiones se usó la denominación "Elohim" para referirse a hombres que estaban ocupando la importante posición de voceros de Dios. Por ejemplo, Dios le dijo a Moisés que debía ser para su hermano Aarón "en lugar de Dios ['Elohim]" (Exo. 4: 16). 

Dios le dio su mensaje a Moisés, quien se lo dio a Aarón, y él a su vez se lo transmitió a Faraón. Esto se ve nuevamente en Exo. 7: 1, donde Dios le dice a Moisés: "Mira, yo te he constituido dios ['Elohim] para Faraón, y tu hermano Aarón será tu profeta". 

 *Estos hombres de responsabilidad eran los representantes del único verdadero 'Elohim, de Aquel que por su gran poder creó todas las cosas, y que por lo tanto es digno de toda reverencia, temor piadoso y culto de parte de los hombres creados. 

*También se usa la palabra 'Elohim para referirse a "jueces" (Exo. 21: 6; 22: 8, 9) teniendo en cuenta su función como representantes de Dios. CBA MHP