domingo, 18 de marzo de 2012

REFLEXIÓN 13:- ¿JUSTIFICADOS POR LA LEY?


“Porque no los oidores de la Ley son justos ante Dios, sino los cumplidores de la Ley serán justificados”. Romanos 2: 13
Al encontrar este versículo hace muchos años atrás, me pregunte que si no era un exceso del Apóstol Pablo, por quedar bien con sus compatriotas judíos. Pero al ir profundizando más en el estudio, salió a la luz otros textos que hablan más de lo mismo, como por ejemplo, el caso del joven rico que un día busco a Jesús, para preguntarle que más le faltaba para entrar en la vida eterna, y Jesús le dijo en San Mateo 19: 17… Más si quieres entrar en la vida, guarda los Mandamientos.

Y en Apocalipsis 22: 14 Dice: en estas tres versiones.
RVG Bienaventurados Los Que Guardan Sus Mandamientos, Para Tener Derecho Al Árbol De La Vida, Y Poder Entrar Por Las Puertas En La Ciudad.
SRV Bienaventurados Los Que Guardan Sus Mandamientos, Para Que Su Potencia Sea En El Árbol De La Vida, Y Que Entren Por Las Puertas En La Ciudad).
RV2000 “¡Dichosos Los Que Guardan Sus Mandamientos, Para Que Tengan Derecho Al Árbol De La Vida Y Entren Por Las Puertas En La Ciudad!
Aunque en otras versiones esta “Bienaventurado los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad- como DHH, RV60,NBJ…

Lavar puede entenderse a las varias etapas del inicio y crecimiento en la fe. Veamos algunos textos:

RV95  San Juan 9:7 y le dijo: -- Ve a lavarte en el estanque de Siloé -- que significa "Enviado"--. Entonces fue, se lavó y regresó viendo.
RV95 2 Reyes 5:10 Entonces Eliseo le envió un mensajero a decirle: "Ve y lávate siete veces en el Jordán; tu carne se restaurará y serás limpio".
RV60 Hechos 22:16: Ahora, pues, ¿Por qué te detienes? Levántate y Bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre.
RV60 1Corintios: y estos erais algunos, ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios.
RV60 Apocalipsis 7:14…Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.

Hasta aquí, no está muy claro de las dos versiones, pero sigamos escuchando la voz de Dios por medio de su palabra, para lo cual leamos el Salmo que habla completamente de los Mandamientos de Dios.

Salmos 119: 9. ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra. ¿Cómo veremos las impurezas en nuestras vidas? ¿Cómo sabemos que corregir? Todos usamos el espejo para vernos en que y como arreglarnos, verdad, el espejo espiritual son los 10 Mandamientos.
Romanos 3: 20. …Porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado.
1 Juan 3: 4. Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley, pues el pecado es infracción de la ley.

Pero puede estar pasando por tu mente, qué, no dijo El Apóstol Pablo también que por las obras de la ley nadie será justificado?, como entender realmente al Apóstol? De que obras de la ley habla Pablo, en Romanos? Por su puesto de los dos tanto moral y ceremonial.

Ahora leamos Romanos 9: 30 – 33. “Pues, ¿qué diremos? Que los gentiles que no buscaban la justicia, la alcanzaron, a saber, la justicia que procede de la fe; mientras que Israel, que seguía la ley de justicia, no alcanzó la justicia. ¿Por qué? Porque no la seguían por la fe, sino por las obras. Por eso tropezaron en la piedra de tropiezo. Como está escrito: "Pongo en Sión una piedra de tropiezo, y roca de caída. El que crea en él, nunca será avergonzado".

¿Qué es la justicia por la fe? Romanos 5:1,2. “Así, habiendo sido justificados por la fe, estamos en paz con Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo. Por medio de él tenemos también acceso por la fe a esta gracia, en la cual estamos firmes. Y nos alegramos en la esperanza de la gloria de Dios.

Los judíos tenían un gran problema a saber. Querían encontrar justificación obedeciendo los mandamientos más los ritos, la sangre de animales, y sin Cristo. Pero los gentiles, alcanzaron la justicia que es por fe, obedeciendo los mandamientos más los ritos que instituyo Jesús, y la sangre del verdadero cordero Jesucristo. Esa es la diferencia que Pablo habla en romanos.

Finalmente, no estoy aquí para hacerte cambiar de opinión acerca de lo que crees o creías, pero sí, estoy aquí para mostrarte lo que realmente dice Dios en su palabra, los judíos no alcanzaron la justicia por que no aceptaron a Cristo como el garante de su salvación. Actualmente los cristianos no aceptan los mandamientos, solo a Jesús. Están cometiendo un grande error como los judíos de ayer.

Por eso el consejo de Apocalipsis 12: 17 habla del pueblo remanente que acepta a Cristo y sus Mandamientos. Los dos son la escalera al cielo. “Por eso los hacedores de la ley serán justificados”. Que Dios te bendiga y el Espíritu Santo sea tu Luz. Amen.

Pio Pablo Huamán Julca 

REFLEXIÓN 12.- Jabes…


Jabes fue el más ilustre de sus hermanos. Su madre lo llamó Jabes, diciendo: "Porque lo di a luz con dolor". Jabes invocó al Dios de Israel diciendo: "¡Oh si me bendijeras y ensancharas mi territorio, y si tu mano fuera conmigo, y me libraras del mal, que no me dañe!" Y Dios le otorgó lo que pidió. (1Cronicas 4: 9,10).

A veces encuentro en mi camino gente que fue marcado por su pasado, una joven me dijo mientras lo visitaba, ¿Dónde estaba Dios cuando fui abusada a los 10 años? Otra joven dijo yo fui abusada sexualmente de niña, pero pude superarlo gracias a Dios a hora tengo mis Hijos y esposo que me ama y soy muy feliz.

La historia de Jabes muestra la historia de un hombre que nació con ciertos traumas, porque su mismo nombre significa dolor, pero él no se quedó contemplando su tragedia, si no que empezó a cambiar toda la información de desdicha que había aprendido en su vida pasada y la actualizó con nueva información, y llegó a ser el más ILUSTRE de toda su familia. No fue un milagro fue el esfuerzo unido a la fe en Dios.

¿De qué se ilustro Jabes? La biblia dice en 2 Timoteo 3:15-17: y que desde niño conoces las Sagradas Escrituras, que te pueden hacer sabio para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. Toda Escritura es inspirada por Dios, y es útil para enseñar, reprender, enmendar e instruir en justicia, para que el hombre sea perfecto, cabalmente instruido para toda buena obra. Y Josué 1:8-9: “"El Libro de la Ley nunca se aparte de tu boca. Antes medita en él de día y de noche, para que guardes y cumplas todo lo que está escrito en él. Entonces prosperarás, y todo te saldrá bien. "Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente. No temas ni desmayes, porque el Eterno tu Dios estará contigo donde quiera que vayas".

JABES encontró éxito en leer y meditar en la Palabra de Dios, y venció. El hizo todo lo que tenía que hacer y Dios le prosperó. El Salmos 37: 3 – 6. “Confía en el Eterno, y haz el bien; habita en la tierra y cultiva la fidelidad; deléitale en el Señor,* y él te dará los deseos de tu corazón. Encomienda al Eterno tu camino, confía en él, y él obrará. Exhibirá tu justicia como la luz, y tu derecho como el mediodía.

Finalmente No importa que fue de nuestro pasado, si nos quisieron o no, si tuvimos Padres o no, eso no determina quienes seremos, si nos apoyamos en Dios y su Palabra, todo eso quedara en el olvido por que Dios nos dará una nueva vida y estaremos felices de que sea nuestro Padre. A si como Jabes ilustrémonos, y con la ayuda de Dios, seremos más que vencedores. Dios te bendiga y esta semilla germine y de buen fruto para vida eterna.
Pio Pablo Huamán Julca 

REFLEXIÓN 11.- Si lo Buscares como a la Plata…


Hijo mío, si recibes mis palabras, y guardas mis Mandamientos dentro de ti, si prestas oído a la sabiduría, si inclinas tu corazón a la prudencia, si clamas a la inteligencia, y a la prudencia das tu voz, si la buscas como a la plata, y la procuras como a tesoros escondidos, entonces entenderás el respeto al Eterno, y hallarás el conocimiento de Dios. Porque el Señor da la sabiduría, de su boca nace el conocimiento y la inteligencia. Provee de sana sabiduría, a los rectos es escudo a los que andan rectamente, guarda las veredas del juicio, y preserva el camino de sus santos. Entonces entenderás justicia, juicio, equidad y todo buen camino. Cuando la sabiduría entre en tu corazón, y la ciencia te sea grata, la discreción te guardará, te preservará la inteligencia, para librarte del mal camino, de los hombres que hablan perversidades, que dejan el sendero recto, para andar por sendas tenebrosas. Que se alegran haciendo mal, que se huelgan en las perversidades del vicio, cuyas veredas son torcidas, y torcidos sus caminos. Te librará de la mujer extraña, de la ajena que halaga con sus palabras, que abandona al compañero de su juventud, y olvida el pacto de su Dios. Por eso su casa está inclinada a la muerte, sus sendas hacia los muertos. Los que se llegan a ella, no vuelven, ni alcanzan otra vez la senda de la vida. Los rectos heredan la vida. Así andarás por el camino de los buenos, seguirás la senda de los justos; porque los rectos habitarán la tierra, y los íntegros permanecerán en ella. Pero los impíos serán cortados de la tierra, y los prevaricadores serán desarraigados de ella. (Proverbios 2: 1-21).

Cuando vemos a que dedican más su tiempo los jóvenes, me quedo asombrado, buscan por millones en el Internet las paginas, Fotografías, videos… que traten de la sensualidad, el morbo, Sexo explícito o pornografía…, y en la vida física, buscan a mujeres que venden su sexualidad por dinero. Sí los Jóvenes supieran lo que tiene Dios para ellos, su vida sería diferente. Cuantos se contagian con enfermedades que no tienen cura. Pero pocos les gusta ser aconsejados, y se resisten a buscar el consejo de Dios.

¿Cuál es lo más importante en tu vida? ¿Qué buscas a toda costa? El consejo de Dios es que lo busquemos a él, más que a la plata y el oro.

Sabes en la vida; lo que nos pasa, solo es producto de lo que elegimos hacer con nuestra vida, y la Biblia está llena de consejos y este proverbio es uno de ellos.

¿Qué harás con el consejo de hoy, los harás tuyo? escucha este sabio consejo y practícalo y todo te saldrá bien. Y te libraras de aflicciones innecesarias y llevaras una vida lleno de grandes satisfacciones, y sobre todo tendrás paz. Dios te bendiga.

Pio Pablo Huamán Julca 

REFLEXIÓN 10.- El Templo de Dios…


No os unáis en yugo desigual con los incrédulos. Porque, ¿qué tiene en común la justicia con la injusticia? ¿Qué comunión tiene la luz con las tinieblas? ¿Qué armonía hay entre Cristo y el diablo? ¿O qué parte tiene el creyente con el incrédulo? ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: "Habitaré y andaré entre ellos. Seré su Dios, y ellos serán mi pueblo". "Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor. No toquéis lo impuro, y yo os recibiré. "Y seré vuestro Padre, y vosotros seréis mis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso". (2Corintios 6: 14-18).

Hay una línea invisible divisoria entre el reino de Dios y el reino del mal. Tanto en el mundo físico y espiritual, cada uno tiene sus servidores, ministradores, hijos… muchos pasan toda su vida negando esta realidad, y viven pensando que el cielo les pertenece , no importando como viven y a quien sirven. recapitulando casi toda la humanidad piensa que su modo de vida no le impedirá su acceso al cielo, cuando mueran, “has escuchado cuando un mundano muere ebrio en un accidente de tránsito lo primero que dicen tanto medios como personas que ya está en el cielo, cerca de Dios…

Los textos de nuestro estudio, habla categóricamente que hay diferencia, que hay separación, para Dios entre sus hijos y los que no lo son, entre lo santo y lo profano, entre la luz y las tinieblas, entre el templo de Dios y los Ídolos, entre Cristo y Satanás… este tema es muy serio, que lo tratemos con mucha oración, preguntémonos como estoy viviendo, como estoy separando de mi vida lo que no agrada a Dios.

La gran mayoría de cristianos cree que estos textos solo tienen que ver con casarse con un incrédulo, pero es más profundo y extenso, tiene que ver también en hacer sociedad comercial con un incrédulo, en tener amigos íntimos, en enamorarse de alguien diferente a tu fe… en casarse con personas de diferentes condiciones sociales, económicas, cultural, …. También la diferencia sexual, varón y mujer deben casarse, y no hombre con hombre o mujer con mujer (Rom. 1: 18 – 32). etc. pero puedes decir eso es hacer diferencia, ojo estamos hablando de las decisiones que han hecho desdichados a muchas personas por no saber elegir.

También tiene que ver con la música que escuchamos, un cristiano no puede hallar deleite amando esa clase de música que lo aleja de Dios, la clase de películas que vemos, cargados de sensualidad, sexo explícito, espiritismo, ocultismo, violencia, programas vánales y triviales… juegos de video, asistir a las discotecas, usar alcohol, tabaco, drogas…Etc.

Resumiendo el templo de Dios que es nuestro cuerpo, santo es, fue comprado con la sangre de Cristo. Sabes querido amigo(a) en aquel día, el día del Señor habrá sorpresas “…muchos me dirán en aquel día, señor, señor…Entonces les diré: ¡Nunca os conocí¡ ¡Apartaos de mí, hacedores del maldad! (San Mateo 7:21-23). En la Biblia, palabra de Dios hay muchas advertencias, sería bueno estudiarlo y enterarnos hoy; de esos requerimientos de Dios, a los que profesamos ser sus hijos.

Más ejemplos: Los borrachos, los que practican sexo ilegal, homosexual, adúlteros… no vivirán junto a Dios. (1Cor. 6: 9 – 11)… y muchos ejemplos más…

En conclusión podemos decir El Señor toma muy en serio la santidad, en el antiguo Israel, te podías contaminar con el solo hecho de tocar un cuerpo muerto, según los textos de hoy: nos contaminamos al unirnos en yugo desigual, al unir la luz y las tinieblas, al unir el mal con el bien, la justicia con la injusticia, si le obedecemos morará en nosotros y nos recibirá como sus hijos…

Que Dios te ayude y su Espíritu te habrá los ojos para ver lo que Dios dice en su palabra hoy: Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: "Habitaré y andaré entre ellos. Seré su Dios, y ellos serán mi pueblo". "Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor. No toquéis lo impuro, y yo os recibiré. "Y seré vuestro Padre, y vosotros seréis mis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso".

Pio Pablo Huamán Julca

CAPÍTULO 5. EL DON DEL ESPÍRITU.


EL DON DEL ESPÍRITU. 

CUANDO CRISTO DIO A SUS DISCÍPULOS LA PROMESA DEL ESPÍRITU, se estaba acercando al fin de su ministerio terrenal. Estaba a la sombra de la cruz, con una comprensión plena de la carga de culpa que estaba por descansar sobre él como portador del pecado. Antes de ofrecerse a sí mismo como víctima destinada al sacrificio, instruyó a sus discípulos en cuanto a la dádiva más esencial y completa que iba a conceder a sus seguidores: el don que iba a poner al alcance de ellos los recursos inagotables de su gracia. "Y yo rogaré al Padre -dijo él,- y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: al Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce: más vosotros le conocéis; porque está con vosotros, y será en vosotros." (Juan 14:16,17).

EL SALVADOR Estaba Señalando Adelante Al Tiempo Cuando El Espíritu Santo Vendría Para Realizar Una Obra Poderosa Como Su Representante. El Mal Que Se Había Estado Acumulando Durante Siglos, Habría De Ser Resistido Por El Divino Poder Del Espíritu Santo.

¿CUÁL FUE EL RESULTADO DEL DERRAMAMIENTO DEL ESPÍRITU EN EL DÍA DE PENTECOSTÉS? Las alegres nuevas de un Salvador resucitado fueron llevadas a las más alejadas partes del mundo habitado. Mientras los discípulos proclamaban el mensaje de la gracia redentora, los corazones se entregaban al poder de su mensaje.

La Iglesia veía afluir a ella conversos de todas direcciones.

Los Apóstatas se reconvertían.

Los Pecadores se unían con los creyentes en busca de la perla de gran precio.

Algunos de los que habían sido los más enconados oponentes del Evangelio, llegaron a ser sus campeones.

SE CUMPLIÓ LA PROFECÍA: "El que entre ellos fuere flaco, . . . será como David: y la casa 40 de David . . . como el ángel de Jehová." (Zac. 12:8).

CADA CRISTIANO veía en su hermano una revelación del amor y la benevolencia divinos. Un Solo Interés Prevalecía, Un Solo Objeto De Emulación Hacía Olvidar Todos Los Demás.

LA AMBICIÓN de los creyentes era revelar la semejanza del carácter de Cristo, y trabajar para el engrandecimiento de su reino. "Y los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús con gran esfuerzo; y gran gracia era en todos ellos." (Hech. 4:33.)

Gracias A Estas Labores fueron añadidos a la iglesia hombres escogidos que, al recibir la palabra de verdad, consagraron sus vidas al trabajo de dar a otros la esperanza que llenaba sus corazones de paz y gozo. No podían ser refrenados ni intimidados por amenazas. El Señor hablaba por su medio, y mientras iban de un lugar a otro, predicaban el Evangelio a los pobres, y se efectuaban milagros de la gracia divina.

Tal Es El Poder Con Que Dios Puede Obrar Cuando Los Hombres Se Entregan Al Dominio De Su Espíritu.

La Promesa Del Espíritu Santo No Se Limita A Ninguna Edad Ni Raza. Cristo Declaró Que La Influencia Divina De Su Espíritu Estaría Con Sus Seguidores Hasta El Fin.

DESDE EL DÍA DE PENTECOSTÉS HASTA AHORA, el Consolador ha sido enviado a todos los que se han entregado plenamente al Señor y a su servicio.

A TODO EL QUE HA ACEPTADO A CRISTO COMO SALVADOR PERSONAL, el Espíritu Santo ha venido como consejero, santificador, guía y testigo. Cuanto más cerca de Dios han andado los creyentes, más clara y poderosamente han testificado del amor de su Redentor y de su gracia salvadora. Los hombres y mujeres que a través de largos siglos de persecución y prueba gozaron de una gran medida de la presencia del Espíritu en sus vidas, se destacaron como señales y prodigios en el mundo. Revelaron ante los ángeles y los hombres el poder transformador del amor redentor.

AQUELLOS QUE EN PENTECOSTÉS FUERON DOTADOS CON EL PODER DE LO ALTO, no quedaron desde entonces libres de tentación y 41 prueba. Como testigos de la verdad y la justicia, eran repetidas veces asaltados por el enemigo de toda verdad, que trataba de despojarlos de su experiencia cristiana. Estaban obligados a luchar con todas las facultades dadas por Dios para alcanzar la medida de la estatura de hombres y mujeres en Cristo Jesús.

ORABAN DIARIAMENTE en procura de nuevas provisiones de gracia para poder elevarse más y más hacia la perfección. Bajo la obra del Espíritu Santo, aún los más débiles, ejerciendo fe en Dios, aprendían a desarrollar las facultades que les habían sido confiadas y llegaron a ser santificados, refinados y ennoblecidos. Mientras se sometían con humildad a la influencia modeladora del Espíritu Santo, recibían de la plenitud de la Deidad y eran amoldados a la semejanza divina.

EL TRANSCURSO DEL TIEMPO no ha cambiado en nada la promesa de despedida de Cristo de enviar el Espíritu Santo como su representante.

NO ES POR CAUSA DE ALGUNA RESTRICCIÓN de parte de Dios por lo que las riquezas de su gracia no fluyen a los hombres sobre la tierra.

SI LA PROMESA NO SE CUMPLE COMO DEBIERA, se debe a que no es apreciada debidamente. Si Todos lo quisieran, todos serían llenados del Espíritu.

DONDEQUIERA La Necesidad Del Espíritu Santo Sea Un Asunto En El Cual Se Piense Poco, se ve sequía espiritual, obscuridad espiritual, decadencia y muerte espirituales. Cuandoquiera los asuntos menores ocupen la atención, el poder divino que se necesita para el crecimiento y la prosperidad de la iglesia, y que traería todas las demás bendiciones en su estela, falta, aunque se ofrece en infinita plenitud.

Puesto Que Éste Es El Medio Por El Cual Hemos De Recibir Poder, ¿Por Qué No Tener Más Hambre Y Sed Del Don Del Espíritu? ¿Por Qué No Hablamos De Él, Oramos Por Él Y Predicamos Respecto A Él?

EL SEÑOR ESTÁ MÁS DISPUESTO A Dar El Espíritu Santo A Los Que Le Sirven, que los padres a dar buenas dádivas a sus hijos.

Cada Obrero debiera elevar su petición a Dios por el bautismo diario del Espíritu.

Debieran reunirse grupos de obreros cristianos para solicitar ayuda especial y sabiduría 42 celestial para hacer planes y ejecutarlos sabiamente.

Debieran orar especialmente porque Dios bautice a sus embajadores escogidos en los campos misioneros con una rica medida de su Espíritu.

La presencia del Espíritu en los obreros de Dios dará a la proclamación de la verdad un poder que todo el honor y la gloria del mundo no podrían conferirle.

EL ESPÍRITU SANTO mora con el obrero consagrado de Dios dondequiera que esté. Las Palabras Habladas A Los Discípulos Son También Para Nosotros. El Consolador Es Tanto Nuestro Como De Ellos.

El Espíritu Provee La Fuerza que sostiene en toda emergencia a las almas que luchan y batallan en medio del odio del mundo y de la comprensión de sus propios fracasos y errores.

En La Tristeza Y La Aflicción, cuando la perspectiva parece obscura y el futuro perturbador, y nos sentimos desamparados y solos: éstas son las veces cuando, en respuesta a la oración de fe, el Espíritu Santo proporciona consuelo al corazón.

¿QUE ES SANTIDAD? No es una evidencia concluyente de que un hombre sea cristiano el que manifieste éxtasis espiritual en circunstancias extraordinarias. La santidad no es arrobamiento: es una entrega completa de la voluntad a Dios; es vivir de toda palabra que sale de la boca de Dios; es hacer la voluntad de nuestro Padre celestial; es confiar en Dios en las pruebas y en la obscuridad tanto como en la luz; es caminar por fe y no por vista; confiar en Dios sin vacilación y descansar en su amor.

EL ESPÍRITU SANTO. No es esencial para nosotros ser capaces de definir con precisión qué es el Espíritu Santo. Cristo nos dice que el Espíritu es el Consolador, "el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre." (Juan 15: 26.) Se asevera claramente tocante al Espíritu Santo, que en su obra de guiar a los hombres a toda verdad, "no hablará de sí mismo." (Juan 16:13).

La Naturaleza Del Espíritu Santo Es Un Misterio. Los hombres no pueden explicarla, porque el Señor no se la ha revelado. Los hombres de conceptos fantásticos pueden reunir pasajes de las Escrituras y darles interpretación humana; pero la 43 aceptación de esos conceptos no fortalecerá a la iglesia. En cuanto a estos misterios, demasiado profundos para el entendimiento humano, el silencio es oro.

El Oficio Del Espíritu Santo Se Especifica claramente en las palabras de Cristo: "Cuando él viniere redargüirá al mundo de pecado, y de justicia, y de juicio." (Juan 16:8.) Es el Espíritu Santo el que convence de pecado. Si el pecador responde a la influencia vivificadora del Espíritu, será inducido a arrepentirse y a comprender la importancia de obedecer los requerimientos divinos.

Al Pecador Arrepentido, Que Tiene Hambre Y Sed De Justicia, el Espíritu Santo le revela el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. "Tomará de lo mío, y os lo hará saber," dijo Cristo. "Él os enseñará todas las cosas, y os recordará todas las cosas que os he dicho." (Juan 16:14; 14:26).

El Espíritu Santo Se Da Como Agente Regenerador, para hacer efectiva la salvación obrada por la muerte de nuestro Redentor.

El Espíritu Santo está tratando constantemente de llamar la atención de los hombres a la gran ofrenda hecha en la cruz del Calvario, de exponer al mundo el amor de Dios, y abrir al alma arrepentida las cosas preciosas de las Escrituras.

Después De Convencer De Pecado, y de presentar ante la mente la norma de justicia, el Espíritu santo quita los afectos de las cosas de esta tierra, y llena el alma con un deseo de santidad. "Él os guiará a toda verdad" (Juan 16:13), declaró el Salvador.

Si Los Hombres Están Dispuestos A Ser Amoldados, se efectuará la santificación de todo el ser.

El Espíritu Tomará Las Cosas De Dios y las imprimirá en el alma. Mediante su poder, el camino de la vida será hecho tan claro que nadie necesite errar.

DESDE EL PRINCIPIO DIOS HA ESTADO OBRANDO POR SU ESPÍRITU SANTO mediante instrumentos humanos para el cumplimiento de su propósito en favor de la raza caída. Esto se manifestó en la vida de los patriarcas.

A La Iglesia Del Desierto También, en los días de Moisés, Dios le dio su "espíritu para enseñarlos." (Neh. 9:20.)

Y En Los Días De Los Apóstoles obró poderosamente 44 en favor de su iglesia por medio del Espíritu Santo.

El Mismo Poder Que Sostuvo A Los Patriarcas, Que Dio Fe Y Ánimo A Caleb Y Josué, Y Que Hizo Eficaz La Obra De La Iglesia Apostólica, Sostuvo A Los Fieles Hijos De Dios En Cada Siglo Sucesivo.

Fue El Poder Del Espíritu Santo lo que durante la época del obscurantismo permitió a los cristianos valdenses contribuir a la preparación del terreno para la Reforma.

Fue El Mismo Poder lo que hizo eficaces los esfuerzos de muchos nobles hombres y mujeres que abrieron el camino para el establecimiento de las misiones modernas, y para la traducción de la Biblia a los idiomas y dialectos de todas las naciones y pueblos.

LA IGLESIA Y EL ESPÍRITU SANTO. Y Hoy, Dios sigue usando su iglesia para dar a conocer su propósito en la tierra.

Hoy los heraldos de la cruz van de ciudad en ciudad, y de país en país para preparar el camino para la segunda venida de Cristo. Se exalta la norma de la ley de Dios.

El Espíritu Del Todopoderoso Conmueve El Corazón De Los Hombres, y los que responden a su influencia llegan a ser testigos de Dios y de su verdad. Pueden verse en muchos lugares hombres y mujeres consagrados comunicando a otros la luz que les aclaró el camino de la salvación por Cristo. Y mientras continúan haciendo brillar su luz, como aquellos que fueron bautizados con el Espíritu en el día de Pentecostés, reciben más y aún más del poder del Espíritu.

Así la tierra ha de ser iluminada con la gloria de Dios.

POR OTRA PARTE, HAY ALGUNOS QUE, EN LUGAR DE APROVECHAR SABIAMENTE LAS OPORTUNIDADES PRESENTES, están esperando ociosamente que alguna ocasión especial de refrigerio espiritual aumente grandemente su capacidad de iluminar a otros. Descuidan sus deberes y privilegios actuales y permiten que su luz se empañe a la espera de un tiempo futuro en el cual, sin ningún esfuerzo de su parte, sean hechos los recipientes de bendiciones especiales que los transformen y capaciten para servir.

ES CIERTO QUE EN EL TIEMPO DEL FIN, cuando la obra de Dios en la tierra esté por terminar, los fervientes esfuerzos realizados por los consagrados creyentes bajo la dirección del Espíritu 45 Santo irán acompañados por manifestaciones especiales del favor divino. Bajo la figura de la lluvia temprana y tardía que cae en los países orientales al tiempo de la siembra y la cosecha, los profetas hebreos predijeron el derramamiento de la gracia espiritual en una medida extraordinaria sobre la iglesia de Dios.

El derramamiento del Espíritu en los días de los apóstoles fue el comienzo de la lluvia temprana, y gloriosos fueron los resultados. Hasta el fin del tiempo, la presencia del Espíritu ha de morar con la iglesia fiel.

Pero acerca del fin de la siega de la tierra, se promete una concesión especial de gracia espiritual, para preparar a la iglesia para la venida del Hijo del hombre. Este derramamiento del Espíritu se compara con la caída de la lluvia tardía; y en procura de este poder adicional, los cristianos han de elevar sus peticiones al Señor de la mies "en la sazón tardía." (Zac. 10:1.) En respuesta, "Jehová hará relámpagos, y os dará lluvia abundante." "Hará descender sobre vosotros lluvia temprana y tardía." (Joel 2:23).

*PERO A MENOS QUE LOS MIEMBROS DE LA IGLESIA DE DIOS hoy tengan una relación viva con la fuente de todo crecimiento espiritual, no estarán listos para el tiempo de la siega. A menos que mantengan sus lámparas aparejadas y ardiendo, no recibirán la gracia adicional en tiempo de necesidad especial.

ÚNICAMENTE Los Que Estén Recibiendo Constantemente Nueva Provisión De Gracia, tendrán una fuerza proporcional a su necesidad diaria y a su capacidad de emplearla.

EN VEZ DE ESPERAR ALGÚN TIEMPO FUTURO en que, mediante el otorgamiento de un poder espiritual especial, sean milagrosamente hechos idóneos para ganar almas, se entregan diariamente a Dios, para que los haga vasos dignos de ser empleados por él.

Diariamente están aprovechando las oportunidades de servir que están a su alcance.

Diariamente están testificando por el Maestro dondequiera que estén, ora sea en alguna humilde esfera de trabajo o en el hogar, o en un ramo público de utilidad.

PARA EL OBRERO CONSAGRADO Es Una Maravillosa Fuente De 46 Consuelo El Saber Que Aun Cristo Durante Su Vida Terrenal Buscaba A Su Padre Diariamente En Procura De Nuevas Provisiones De Gracia Necesaria; Y De Esta Comunión Con Dios Salía Para Fortalecer Y Bendecir A Otros.

¡CONTEMPLAD Al Hijo De Dios Postrado En Oración Ante Su Padre! Aunque es el Hijo de Dios, fortalece su fe por la oración, y por la comunión con el cielo acumula en sí poder para resistir el mal y para ministrar las necesidades de los hombres.

COMO HERMANO MAYOR de nuestra especie, conoce las necesidades de aquellos que, rodeados de flaquezas y viviendo en un mundo de pecado y de tentación, desean todavía servir a Dios. Sabe que los mensajeros a quienes considera dignos de enviar son hombres débiles y expuestos a errar; pero a todos aquellos que se entregan enteramente a su servicio les promete ayuda divina. Su propio ejemplo es una garantía de que la súplica ferviente y perseverante a Dios con fe ­la fe que induce a depender enteramente de Dios y a consagrarse sin reservas a su obra­ podrá proporcionar a los hombres la ayuda del Espíritu Santo en la batalla contra el pecado.

TODO OBRERO QUE SIGUE EL EJEMPLO DE CRISTO será preparado para recibir y usar el poder que Dios ha prometido a su iglesia para la maduración de la mies de la tierra. Mañana tras mañana, cuando los heraldos del Evangelio se arrodillan delante del Señor y renuevan sus votos de consagración, él les concede la presencia de su Espíritu con su poder vivificante y santificador. Y al salir para dedicarse a los deberes diarios, tienen la seguridad de que el agente invisible del Espíritu Santo los capacita para ser colaboradores juntamente con Dios. 47

Los Hechos De Los Apóstoles En La Proclamación

Del Evangelio De Jesucristo. (EGW). MHP


lunes, 12 de marzo de 2012

CAPÍTULO 4. PENTECOSTÉS.

 PENTECOSTÉS.

CUANDO LOS DISCÍPULOS VOLVIERON DEL OLIVAR A JERUSALÉN, la gente los miraba, esperando ver en sus rostros expresiones de tristeza, confusión y chasco; pero vieron alegría y triunfo. Los discípulos no lloraban ahora esperanzas frustradas. Habían visto al Salvador resucitado, y las palabras de su promesa de despedida repercutían constantemente en sus oídos.

En Obediencia A La Orden De Cristo, Aguardaron En Jerusalén La Promesa Del Padre, El Derramamiento Del Espíritu. No aguardaron ociosos. El relato dice que estaban "de continuo en el templo, alabando y bendiciendo a Dios." También se reunieron para presentar sus pedidos al Padre en el nombre de Jesús. Sabían que tenían un Representante en el cielo, un Abogado ante el trono de Dios. Con solemne temor reverente se postraron en oración, repitiendo las palabras impregnadas de seguridad: "Todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os lo dará. Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre: pedid y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido." (Juan 16:23,24.) Extendían más y más la mano de la fe, con el poderoso argumento: "Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, quien además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros." (Rom. 8:34.)

MIENTRAS LOS DISCÍPULOS Esperaban El Cumplimiento De La Promesa, humillaron sus corazones con verdadero arrepentimiento, y confesaron su incredulidad. Al recordar las palabras que Cristo les había hablado antes de su muerte, entendieron más plenamente su significado.

FUERON TRAÍDAS DE NUEVO A SU MEMORIA VERDADES QUE HABÍAN OLVIDADO, y las repetían unos a 30 otros. Se reprocharon a sí mismos el haber comprendido tan mal al Salvador. Como en procesión, pasó delante de ellos una escena tras otra de su maravillosa vida. Cuando meditaban en su vida pura y santa, sentían que no habría trabajo demasiado duro, ni sacrificio demasiado grande, si tan sólo pudiesen ellos atestiguar con su vida la belleza del carácter de Cristo. ¡Oh, si tan sólo pudieran vivir de nuevo los tres años pasados, pensaban ellos, de cuán diferente modo procederían! Si sólo pudieran ver al Señor de nuevo, cuán fervorosamente tratarían de mostrar la profundidad de su amor y la sinceridad de la tristeza que sentían por haberle apenado con palabras o actos de incredulidad. Pero se consolaron con el pensamiento de que estaban perdonados. Y resolvieron que, hasta donde fuese posible, expiarían su incredulidad confesándolo valientemente delante del mundo.

LOS DISCÍPULOS ORARON Con Intenso Fervor Pidiendo Capacidad Para Encontrarse Con Los Hombresy en su trato diario hablar palabras que pudieran guiar a los pecadores a Cristo. Poniendo aparte toda diferencia, todo deseo de supremacía, se unieron en estrecho compañerismo cristiano. Se acercaron más y más a Dios, y al hacer esto, comprendieron cuán grande privilegio habían tenido al poder asociarse tan estrechamente con Cristo.

LA TRISTEZA LLENÓ SUS CORAZONES al pensar en cuántas veces le habían apenado por su tardo entendimiento y su incomprensión de las lecciones que, para el bien de ellos, estaba procurando enseñarles.

ESTOS DÍAS DE PREPARACIÓN FUERON DÍAS DE PROFUNDO ESCUDRIÑAMIENTO DEL CORAZÓN. Los discípulos sentían su necesidad espiritual, y clamaban al Señor por la santa unción que los había de hacer idóneos para la obra de salvar almas. No pedían una bendición simplemente para sí. Estaban abrumados por la preocupación de salvar almas. Comprendían que el Evangelio había de proclamarse al mundo, y demandaban el poder que Cristo había prometido.

DURANTE LA ERA PATRIARCAL, la influencia del Espíritu Santo se 31 había revelado a menudo en forma señalada, pero nunca en su plenitud.

AHORA, EN OBEDIENCIA a la palabra del Salvador, los discípulos ofrecieron sus súplicas por este don, Y EN EL CIELO CRISTO añadió su intercesión. Reclamó el don del Espíritu, para poderlo derramar sobre su pueblo.

*"Y COMO SE CUMPLIERON LOS DÍAS DE PENTECOSTÉS, estaban todos unánimes juntos; y de repente vino un estruendo del cielo como de un viento recio que corría, el cual hinchió toda la casa donde estaban sentados."

Sobre los discípulos que esperaban y oraban vino el Espíritu con una plenitud que alcanzó a todo corazón. El Ser Infinito se reveló con poder a su iglesia.

Era como si durante siglos esta influencia hubiera estado restringida, y ahora el Cielo se regocijará en poder derramar sobre la iglesia las riquezas de la gracia del Espíritu. Y bajo la influencia del Espíritu, las palabras de arrepentimiento y confesión se mezclaban con cantos de alabanza por el perdón de los pecados.

Se oían palabras de agradecimiento y de profecía. Todo el Cielo se inclinó para contemplar y adorar la sabiduría del incomparable e incomprensible amor. Extasiados de asombro, los apóstoles exclamaron: "En esto consiste el amor." Se asieron del don impartido. ¿Y qué siguió? La espada del Espíritu, recién afilada con el poder y bañada en los rayos del cielo, se abrió paso a través de la incredulidad. Miles se convirtieron en un día. "Es necesario que yo vaya ­había dicho Cristo a sus discípulos;­ porque si yo no fuese, el Consolador no vendría a vosotros; más si yo fuere, os le enviaré." "Pero cuando viniere aquel Espíritu de verdad, él os guiará a toda verdad; porque no hablará de sí mismo, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que han de venir." (Juan 16:7,13.)

LA ASCENSIÓN DE CRISTO AL CIELO Fue La Señal De Que Sus Seguidores Iban A Recibir La Bendición Prometida. Habían de esperarla antes de empezar a hacer su obra. Cuando Cristo entró por los portales celestiales, fue entronizado en medio de la adoración de los ángeles. Tan pronto como esta ceremonia hubo 32 terminado, el Espíritu Santo descendió sobre los discípulos en abundantes raudales, y Cristo fue de veras glorificado con la misma gloria que había tenido con el Padre, desde toda la eternidad.

EL DERRAMAMIENTO PENTECOSTAL era la comunicación del Cielo de que el Redentor había iniciado su ministerio celestial. De acuerdo con su promesa, había enviado el Espíritu Santo del cielo a sus seguidores como prueba de que, como sacerdote y rey, había recibido toda autoridad en el cielo y en la tierra, y era el Ungido sobre su pueblo.

*"Y SE LES APARECIERON LENGUAS REPARTIDAS, Como De Fuego, Que Se Asentó Sobre Cada Uno De Ellos. Y Fueron Todos Llenos Del Espíritu Santo, Y Comenzaron A Hablar En Otras Lenguas, Como El Espíritu Les Daba Que Hablasen."

El Espíritu Santo, asumiendo la forma de lenguas de fuego, descansó sobre los que estaban congregados. Esto era un emblema del don entonces concedido a los discípulos, que los habilitaba para hablar con facilidad idiomas antes desconocidos para ellos. La apariencia de fuego significaba el celo ferviente con que los apóstoles iban a trabajar, y el poder que iba a acompañar su obra.

"Moraban entonces en Jerusalén Judíos, varones religiosos, de todas las naciones debajo del cielo."

DURANTE LA DISPERSIÓN, los judíos habían sido esparcidos a casi todos los lugares del mundo habitado, y en su destierro habían aprendido a hablar varios idiomas. Muchos de estos judíos estaban en esta ocasión en Jerusalén, asistiendo a las festividades religiosas que se celebraban. Toda lengua conocida estaba representada por la multitud reunida. Esta diversidad de idiomas hubiera representado un gran obstáculo para la proclamación del Evangelio; por lo tanto Dios suplió de una manera milagrosa la deficiencia de los apóstoles. El Espíritu Santo hizo por ellos lo que los discípulos no hubieran podido llevar a cabo en todo el curso de su vida.

Ellos podían ahora proclamar las verdades del Evangelio extensamente, pues hablaban con corrección los idiomas de aquellos por quienes trabajaban. Este don milagroso era una evidencia poderosa para el mundo de que la 33 comisión de ellos llevaba el sello del cielo. Desde entonces en adelante, el habla de los discípulos fue pura, sencilla y correcta, ya hablaran en su idioma nativo o en idioma extranjero.

*"Y HECHO ESTE ESTRUENDO, JUNTÓSE LA MULTITUD; y estaban confusos, porque cada uno les oía hablar su propia lengua. Y estaban atónitos y maravillados, diciendo: He aquí ¿no son Galileos todos estos que hablan? ¿Cómo, pues, les oímos nosotros hablar cada uno en nuestra lengua en que somos nacidos?"

Los sacerdotes y gobernantes se enfurecieron grandemente al ver esta manifestación maravillosa, pero no se atrevían a ceder a su malicia, por temor a exponerse a la violencia del pueblo. Habían dado muerte al Nazareno; pero allí estaban sus siervos, hombres indoctos de Galilea, contando en todos los idiomas entonces hablados, la historia de su vida y ministerio.

LOS SACERDOTES, resueltos a explicar de alguna manera natural el poder milagroso de los discípulos, declararon que estaban borrachos, por haber bebido demasiado vino nuevo preparado para la fiesta. Algunos de los más ignorantes del pueblo presente aceptaron como cierta esta sugestión, pero los más inteligentes sabían que era falsa; los que entendían las diferentes lenguas daban testimonio de la corrección con que estas lenguas eran usadas por los discípulos.

EN RESPUESTA A La Acusación De Los Sacerdotes, Pedro Expuso Que Esta Demostración Era El Cumplimiento Directo De La Profecía De Joel, En La Cual Predijo Que Tal Poder Vendría Sobre Los Hombres A Fin De Capacitarlos Para Una Obra Especial. "Varones Judíos, y todos los que habitáis en Jerusalén ­ dijo él, ­ esto os sea notorio, y oíd mis palabras. Porque éstos no están borrachos, como vosotros pensáis, siendo la hora tercia del día; mas esto es lo que fue dicho por el profeta Joel: Y será en los postreros días, dice Dios, derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; y vuestros mancebos verán visiones, y vuestros viejos soñarán sueños: y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días derramaré mi Espíritu, y profetizarán." 34

Con claridad y poder Pedro dio testimonio de la muerte y resurrección de Cristo: "Varones Israelitas, oíd estas palabras: Jesús Nazareno, varón aprobado de Dios entre vosotros en maravillas y prodigios y señales, que Dios hizo por él en medio de vosotros, como también vosotros sabéis; a éste . . . prendisteis y matasteis por manos de los inicuos, crucificándole; al cual Dios levantó, sueltos los dolores de la muerte, por cuanto era imposible ser detenido por ella."

PEDRO NO SE REFIRIÓ A LAS ENSEÑANZAS DE CRISTO para probar su aserto, porque sabía que el prejuicio de sus oyentes era tan grande que sus palabras a ese respecto no surtirían efecto. En lugar de ello, les habló de David, a quien consideraban los judíos como uno de los patriarcas de su nación. "David dice de él ­declaró:­ Veía al Señor siempre delante de mí: porque está a mi diestra, no seré conmovido. Por lo cual mi corazón se alegró, y gozóse mi lengua; y aún mi carne descansará en esperanza; que no dejarás mi alma en el infierno, ni darás a tu Santo que vea corrupción. . . "Varones hermanos, se os puede libremente decir del patriarca David, que murió, y fue sepultado, y su sepulcro está con nosotros hasta el día de hoy." "Habló de la resurrección de Cristo, que su alma no fue dejada en el infierno, ni su carne vio corrupción. A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos."

LA ESCENA ESTÁ LLENA DE INTERÉS. El pueblo acude de todas direcciones para oír a los discípulos testificar de la verdad como es en Jesús. Se agolpa, llena el templo.

LOS SACERDOTES Y GOBERNANTES ESTÁN ALLÍ, con el obscuro ceño de la malignidad todavía en el rostro, con el corazón aún lleno de odio contra Cristo, con las manos manchadas por la sangre derramada cuando crucificaron al Redentor del mundo. Ellos habían pensado encontrar a los apóstoles acobardados de temor bajo la fuerte mano de la opresión y el asesinato, pero los hallaron por encima de todo temor, llenos del Espíritu, proclamando con poder la divinidad de Jesús de Nazaret. Los 35 oyeron declarar con intrepidez que Aquel que había sido recientemente humillado, escarnecido, herido por manos crueles, y crucificado, era el Príncipe de la vida, exaltado ahora a la diestra de Dios.

ALGUNOS DE LOS QUE ESCUCHABAN A LOS APÓSTOLES HABÍAN TOMADO PARTE ACTIVA EN LA CONDENACIÓN Y MUERTE DE CRISTO. Sus voces se habían mezclado con las del populacho en demanda de su crucifixión. Cuando Jesús y Barrabás fueron colocados delante de ellos en la sala del juicio, y Pilato preguntó: "¿Cuál queréis que os suelte?" ellos habían gritado: "No a éste, sino a Barrabás." (Mat. 27:17; Juan 18:40.)

 Cuando Pilato les entregó a Cristo, diciendo: "Tomadle vosotros, y crucificadle; porque yo no hallo en él crimen;" "inocente soy de la sangre de este justo," ellos habían gritado: "Su sangre sea sobre nosotros y sobre nuestros hijos." (Juan 19:6; Mat. 27:24, 25.)

AHORA OÍAN A LOS DISCÍPULOS DECLARAR QUE ERA EL HIJO DE DIOS EL QUE HABÍA SIDO CRUCIFICADO. Los sacerdotes y gobernantes temblaban. La convicción y la angustia se apoderaron del pueblo. "Entonces oído esto, fueron compungidos de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos?" Entre los que escucharon a los discípulos, había judíos devotos, que eran sinceros en su creencia. El poder que acompañaba a las palabras del orador los convenció de que Jesús era en verdad el Mesías. "Y Pedro les dice: Arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare."

PEDRO INSISTIÓ ANTE EL CONVICTO PUEBLO En El Hecho De Que Habían Rechazado A Cristo Porque Habían Sido Engañados Por Los Sacerdotes Y Gobernantes; y en que si continuaban dependiendo del consejo de esos hombres y esperando que reconocieran a Cristo antes de reconocerlo ellos mismos, jamás le aceptarían. Esos hombres poderosos, aunque hacían profesión 36 de piedad, ambicionaban las glorias y riquezas terrenales. No estaban dispuestos a acudir a Cristo para recibir luz.

Bajo la influencia de esta iluminación celestial, las escrituras que Cristo había explicado a los discípulos resaltaron delante de ellos con el brillo de la verdad perfecta. El velo que les había impedido ver hasta el extremo de lo que había sido abolido, fue quitado ahora, y comprendieron con perfecta claridad el objeto de la misión de Cristo y la naturaleza de su reino. Podían hablar con poder del Salvador; y mientras exponían a sus oyentes el plan de la salvación, muchos quedaron convictos y convencidos.

LAS TRADICIONES Y SUPERSTICIONES Inculcadas Por Los Sacerdotes Fueron Barridas De Sus Mentes, Y Las Enseñanzas Del Salvador Fueron Aceptadas.

"Así que, los que recibieron su palabra, fueron bautizados; y fueron añadidas a ellos aquel día como tres mil personas."

LOS DIRIGENTES JUDÍOS HABÍAN SUPUESTO QUE LA OBRA DE CRISTO TERMINARÍA CON SU MUERTE; pero en vez de eso fueron testigos de las maravillosas escenas del día de Pentecostés. Oyeron a los discípulos predicar a Cristo, dotados de un poder y energía hasta entonces desconocidos, y sus palabras confirmadas con señales y prodigios.

En Jerusalén, La Fortaleza Del Judaísmo, Miles Declararon Abiertamente Su Fe En Jesús De Nazaret Como El Mesías.

Los discípulos se asombraban y se regocijaban en gran manera por la amplitud de la cosecha de almas. No consideraban esta maravillosa mies como el resultado de sus propios esfuerzos; comprendían que estaban entrando en las labores de otros hombres. Desde la caída de Adán, Cristo había estado confiando a sus siervos escogidos la semilla de su palabra, para que fuese sembrada en los corazones humanos. Durante su vida en la tierra, había sembrado la semilla de la verdad, y la había regado con su sangre.

LAS CONVERSIONES que se produjeron en el día de Pentecostés fueron el resultado de esa siembra, la cosecha de la obra de Cristo, que revelaba el poder de su enseñanza. 37

LOS ARGUMENTOS DE LOS APÓSTOLES POR SÍ SOLOS, aunque claros y convincentes, NO HABRÍAN ELIMINADO EL PREJUICIO que había resistido tanta evidencia. Pero el Espíritu Santo hizo penetrar los argumentos en los corazones con poder divino. Las palabras de los apóstoles eran como saetas agudas del Todopoderoso que convencían a los hombres de su terrible culpa por haber rechazado y crucificado al Señor de gloria.

BAJO LA INSTRUCCIÓN DE CRISTO, los discípulos habían sido inducidos a sentir su necesidad del Espíritu. Bajo la enseñanza del Espíritu, recibieron la preparación final y salieron a emprender la obra de su vida. Ya no eran ignorantes y sin cultura.  Ya no eran una colección de unidades independientes, ni elementos discordantes y antagónicos.

YA NO ESTABAN SUS ESPERANZAS CIFRADAS EN LA GRANDEZA MUNDANAL. Eran "unánimes," "de un corazón y un alma." (Hech. 2:46; 4:32). Cristo llenaba sus pensamientos; su objeto era el adelantamiento de su reino. En mente y carácter habían llegado a ser como su Maestro, y los hombres "conocían que habían estado con Jesús." (Hech. 4:13)

EL DÍA DE PENTECOSTÉS LES TRAJO LA ILUMINACIÓN CELESTIAL. Las verdades que no podían entender mientras Cristo estaba con ellos quedaron aclaradas ahora. Con una fe y una seguridad que nunca habían conocido antes, aceptaron las enseñanzas de la Palabra Sagrada. Ya no era más para ellos un asunto de fe el hecho de que Cristo era el Hijo de Dios. Sabían que, aunque vestido de la humanidad, era en verdad el Mesías, y contaban su experiencia al mundo con una confianza que llevaba consigo la convicción de que Dios estaba con ellos.

PODÍAN PRONUNCIAR EL NOMBRE DE JESÚS CON SEGURIDAD; porque ¿no era él su Amigo y Hermano mayor? Puestos en comunión con Cristo, se sentaron con él en los lugares celestiales. ¡Con qué ardiente lenguaje revestían sus ideas al testificar por él! Sus corazones estaban sobrecargados con una benevolencia tan plena, tan profunda, de tanto alcance, que los impelía a ir hasta los confines de la tierra, para testificar del poder de 38 Cristo. Estaban llenos de un intenso anhelo de llevar adelante la obra que él había comenzado. Comprendían la grandeza de su deuda para con el cielo, y la responsabilidad de su obra. Fortalecidos por la dotación del Espíritu Santo, salieron llenos de celo a extender los triunfos de la cruz. El Espíritu los animaba y hablaba por ellos. La paz de Cristo brillaba en sus rostros. Habían consagrado sus vidas a su servicio, y sus mismas facciones llevaban la evidencia de la entrega que habían hecho. 39

Los Hechos De Los Apóstoles En La Proclamación

Del Evangelio De Jesucristo. (EGW). MHP


CAPÍTULO 3. LA GRAN COMISIÓN.

 LA GRAN COMISIÓN. 

DESPUÉS DE LA MUERTE DE CRISTO, los discípulos estuvieron a punto de ser vencidos por el desaliento. Su Señor había sido rechazado, condenado y crucificado. Los sacerdotes y gobernantes habían declarado con sorna: "A otros salvó, a sí mismo no puede salvar: si es el Rey de Israel, descienda ahora de la cruz, y creeremos en él." (Mat. 27:42.) El sol de la esperanza de los discípulos se había puesto, y la noche había descendido sobre sus corazones. 

A menudo repetían las palabras: "Nosotros esperábamos que él era el que había de redimir a Israel." (Luc. 24:21.) Solitarios y con el corazón quebrantado, recordaron sus palabras: "Porque si en el árbol verde hacen estas cosas, ¿en el seco, qué se hará?" (Luc. 23:31.)

JESÚS HABÍA INTENTADO VARIAS VECES DESCORRER EL VELO DEL FUTURO ANTE SUS DISCÍPULOS, pero ellos no se habían interesado en pensar en las cosas que él decía. Por causa de esto, su muerte los había sorprendido; y ellos, al recapitular el pasado y ver el resultado de su incredulidad, se llenaron de tristeza. Cuando Cristo fue crucificado, no creyeron que resucitaría. Él les había dicho claramente que se levantaría al tercer día, pero ellos, perplejos, deseaban saber qué quería decir. Esta falta de comprensión los dejó enteramente desesperados en ocasión de su muerte. Quedaron amargamente chasqueados. Su fe no traspasaba las sombras que Satanás había arrojado a través del horizonte de ellos. Todo les parecía vago y misterioso. Si hubieran creído las palabras del Salvador, ¡cuánta tristeza hubieran podido evitar!

Aplastados por el desaliento, la pena y la desesperación, los discípulos se reunieron en el aposento alto, y cerraron y 22 atrancaron las puertas, temiendo que pudiera sobrevenirles la misma suerte de su amado Maestro. Fue allí donde el Salvador, después de su resurrección se les apareció.

POR CUARENTA DÍAS CRISTO PERMANECIÓ EN LA TIERRA, preparando a los discípulos para la obra que tenían por delante, y explicándoles lo que hasta entonces habían sido incapaces de comprender. Les habló de las profecías concernientes a su advenimiento, su rechazamiento por los judíos, y su muerte, mostrando que todas las especificaciones de estas profecías se habían cumplido. Les dijo que debían considerar este cumplimiento de la profecía como una garantía del poder que los asistiría en sus labores futuras. "Entonces les abrió el sentido ­leemos, ­para que entendiesen las Escrituras; y díjoles: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día; y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y la remisión de pecados en todas las naciones, comenzando de Jerusalén." Y añadió: "Vosotros sois testigos de estas cosas." (Luc. 24:45-48.)

DURANTE ESTOS DÍAS QUE CRISTO PASÓ CON SUS DISCÍPULOS, OBTUVIERON ELLOS UNA NUEVA EXPERIENCIA. Mientras oían a su amado Señor explicando las Escrituras a la luz de todo lo que había sucedido, su fe en él se estableció plenamente. Llegaron al punto de poder decir: "Yo sé a quién he creído." (2Tim. 1:12). Comenzaron a comprender la naturaleza y extensión de su obra, a ver que habían de proclamar al mundo las verdades que se les habían encomendado. Los sucesos de la vida de Cristo, su muerte y resurrección, las profecías que señalaban estos sucesos, los misterios del plan de la salvación, el poder de Jesús para perdonar los pecados, ­de todas estas cosas habían sido testigos, y debían hacerlas conocer al mundo. Debían proclamar el Evangelio de paz y salvación mediante el arrepentimiento y el poder del Salvador.

ANTES DE ASCENDER AL CIELO, CRISTO DIO A LOS DISCÍPULOS SU COMISIÓN. Les dijo que debían ser los ejecutores del testamento por el cual él legaba al mundo los tesoros de la vida eterna. 23 Vosotros habéis sido testigos de mi vida de sacrificio en favor del mundo, les dijo. Habéis visto mis labores por Israel. Y aunque mi pueblo no quiso acudir a mí para poder tener vida, a pesar de que los sacerdotes y gobernantes han hecho conmigo lo que querían, aunque me han rechazado, tendrán todavía otra oportunidad de aceptar al Hijo de Dios. Habéis visto que recibo libremente a todos los que acuden a mí confesando sus pecados. Al que a mí viene no lo echaré fuera de ninguna manera. Os encomiendo a vosotros, mis discípulos, este mensaje de misericordia. Ha de darse tanto a los judíos como a los gentiles, ­primero a Israel y entonces a todas las naciones, lenguas y pueblos. Todos los que crean integrarán una iglesia.

LA COMISIÓN EVANGÉLICA ES LA MAGNA CARTA MISIONERA DEL REINO DE CRISTOLos discípulos habían de trabajar fervorosamente por las almas, dando a todos la invitación de misericordia. No debían esperar que la gente viniera a ellos; sino que debían ir ellos a la gente con su mensaje.

Los discípulos habían de realizar su obra en el nombre de Cristo. Todas sus palabras y hechos habían de llamar la atención al poder vital de su nombre para salvar a los pecadores. Su fe habría de concentrarse en Aquel que es la fuente de la misericordia y el poder. En su nombre habían de presentar sus peticiones ante el Padre, y recibirían respuesta. Habían de bautizar en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

El nombre de Cristo había de ser su consigna, su divisa distintiva, su vínculo de unión, la autoridad para su curso de acción y la fuente de su éxito. Nada que no llevara su nombre y su inscripción había de ser reconocido en su reino.

Cuando Cristo dijo a sus discípulos: Salid en mi nombre para traer a la iglesia a todos los que crean, les presentó claramente la necesidad de conservar la sencillez. Cuanto menor fuera su ostentación, mayor sería su influencia para el bien. Los discípulos habían de hablar con la misma sencillez con que había hablado Cristo. Debían impresionar en sus oyentes las lecciones que él les había enseñado. 24

CRISTO NO DIJO A SUS DISCÍPULOS QUE SU TRABAJO SERÍA FÁCIL. Les mostró la vasta confederación del mal puesta en orden de batalla contra ellos. Tendrían que luchar "contra principados, contra potestades, contra señores del mundo, gobernadores de estas tinieblas, contra malicias espirituales en los aires." (Efe. 6: 12). Pero no se los dejaría luchar solos. Les aseguró que él estaría con ellos; y que si ellos avanzaban con fe, estarían bajo el escudo de la omnipotencia. Les ordenó que fuesen valientes y fuertes; porque Uno más poderoso que los ángeles estaría en sus filas: el General de los ejércitos del cielo. Hizo amplia provisión para la prosecución de su obra, y asumió él mismo la responsabilidad de su éxito.

MIENTRAS OBEDECIERAN SU PALABRA Y TRABAJASEN EN COMUNIÓN CON ÉL, NO PODRÍAN FRACASAR. Id a todas las naciones, les ordenó, id a las partes más alejadas del globo habitable, y estad seguros de que aun allí mi presencia estará con vosotros. Trabajad con fe y confianza; porque yo no os olvidaré nunca. Estaré siempre con vosotros, ayudándoos a realizar y cumplir vuestro deber, guiándoos, alentándoos, santificándoos, sosteniéndoos y dándoos éxito en hablar palabras que llamen la atención de otros al cielo.

EL SACRIFICIO DE CRISTO EN FAVOR DEL HOMBRE FUE PLENO Y COMPLETO. La condición de la expiación se había cumplido. La obra para la cual él había venido a este mundo se había efectuado. Él había ganado el reino. Se lo había arrebatado a Satanás, y había llegado a ser heredero de todas las cosas. Estaba en camino al trono de Dios, para ser honrado por la hueste celestial.

REVESTIDO DE AUTORIDAD ILIMITADA, DIO A SUS DISCÍPULOS SU COMISIÓN: "Por tanto, id, y doctrinad a todos los Gentiles, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo: enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado: y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo." (Mat. 28:19,20.)

PRECISAMENTE ANTES DE DEJAR A SUS DISCÍPULOS, CRISTO EXPLICÓ CLARAMENTE UNA VEZ MÁS LA NATURALEZA DE SU REINO. Les recordó las cosas que les había dicho anteriormente respecto a ese reino. 25 Declaró que no era su propósito establecer en este mundo un reino temporal.  No estaba destinado a reinar como monarca terrenal en el trono de David. Cuando los discípulos le preguntaron: "Señor, ¿restituirás el reino a Israel en este tiempo?" él respondió: "No toca a vosotros saber los tiempos o las sazones que el Padre puso en su sola potestad." (Hech. 1:6,7.) No era necesario para ellos penetrar más en el futuro de lo que las revelaciones que él había hecho los capacitaban para hacerlo. Su trabajo era proclamar el mensaje evangélico.

LA PRESENCIA VISIBLE DE CRISTO ESTABA POR SERLES QUITADA A LOS DISCÍPULOS, pero iban a recibir una nueva dotación de poder. Iba a serles dado el Espíritu Santo en su plenitud, el cual los sellaría para su obra. "He aquí ­dijo el Salvador,­ yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros: más vosotros asentad en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de potencia de lo alto." (Luc. 24:49.) "Porque Juan a la verdad bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo no muchos días después de éstos." "Más recibiréis la virtud del Espíritu Santo que vendrá sobre vosotros; y me seréis testigos en Jerusalén, y en toda Judea, y Samaria, y hasta lo último de la tierra." (Hech. 1:5,8).

EL SALVADOR SABÍA QUE NINGÚN ARGUMENTO, por lógico que fuera, podría ablandar los duros corazones, o traspasar la costra de la mundanalidad y el egoísmo. Sabía que los discípulos habrían de recibir la dotación celestial; que el Evangelio sería eficaz sólo en la medida en que fuera proclamado por corazones encendidos y labios hechos elocuentes por el conocimiento vivo de Aquel que es el camino, la verdad y la vida.

LA OBRA ENCOMENDADA A LOS DISCÍPULOS REQUERIRÍA GRAN EFICIENCIA; porque la corriente del mal que fluía contra ellos era profunda y fuerte. Estaba al frente de las fuerzas de las tinieblas un caudillo vigilante y resuelto, y los seguidores de Cristo podrían batallar por el bien sólo mediante la ayuda que Dios, por su Espíritu, les diera.

CRISTO DIJO A SUS DISCÍPULOS Que Ellos Debían Comenzar Su 26 Trabajo En Jerusalén. Esa Ciudad Había Sido El Escenario De Su Asombroso Sacrificio Por La Raza Humana.

Allí, cubierto con el vestido de la humanidad, había caminado y hablado con los hombres, y pocos habían discernido cuánto se había acercado el cielo a la tierra. Allí había sido condenado y crucificado.

EN JERUSALÉN HABÍA MUCHOS QUE CREÍAN SECRETAMENTE QUE JESÚS DE NAZARET ERA EL MESÍASY Muchos Que Habían Sido Engañados Por Los Sacerdotes Y Gobernantes. El Evangelio debía ser proclamado a éstos. Debían ser llamados al arrepentimiento. Debía aclararse la maravillosa verdad de que sólo mediante Cristo puede obtenerse la remisión de los pecados. Y mientras Jerusalén estaba agitada por los conmovedores sucesos de pocas semanas atrás, era cuando la predicación de los discípulos haría la más profunda impresión.

DURANTE SU MINISTERIO, Jesús había mantenido constantemente ante los discípulos el hecho de que ellos habrían de ser uno con él en su obra de rescatar al mundo de la esclavitud del pecado. Cuando envió a los doce y más tarde a los setenta, a proclamar el reino de Dios, les estaba enseñando su deber de impartir a otros lo que él les había hecho conocer. En toda su obra, los estaba preparando para una labor individual, que se extendería a medida que el número de ellos creciese, y finalmente alcanzaría a las más apartadas regiones de la tierra.

La Última Lección Que Dio A Sus Seguidores Era Que Se Les Habían Encomendado Para El Mundo Las Alegres Nuevas De La Salvación.

CUANDO LLEGÓ EL MOMENTO EN QUE DEBÍA ASCENDER A SU PADRE, Cristo condujo a los discípulos hasta Betania. Allí se detuvo, y ellos se reunieron en derredor de él. Con las manos extendidas en ademán de bendecir, como asegurándoles su cuidado protector, ascendió lentamente de entre ellos. "Y aconteció que bendiciéndolos, se fue de ellos; y era llevado arriba al cielo."(Luc. 24: 51.)

Mientras los discípulos estaban mirando arriba para recibir la última vislumbre de su Señor que ascendía, él fue recibido en las gozosas filas de los ángeles celestiales. Mientras estos 27 ángeles lo escoltaban a los atrios de arriba, cantaban triunfalmente: "Reinos de la tierra, cantad a Dios, cantad al Señor; al que cabalga sobre los cielos de los cielos.... Atribuid fortaleza a Dios: sobre Israel es su magnificencia, y su poder está en los cielos." (Sal. 68:32-34.)

LOS DISCÍPULOS estaban todavía mirando fervientemente hacia el cielo cuando "he aquí, dos varones se pusieron junto a ellos en vestidos blancos; los cuales también les dijeron: Varones Galileos, ¿qué estáis mirando al cielo? este mismo Jesús que ha sido tomado desde vosotros arriba en el cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo." (Hech. 1:10,11.)

LA PROMESA DE LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO habría de mantenerse siempre fresca en las mentes de sus discípulos. El mismo Jesús a quien ellos habían visto ascender al cielo, vendría otra vez, para llevar consigo a aquellos que aquí estuvieran entregados a su servicio. La misma voz que les había dicho: "He aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo,' les daría la bienvenida a su presencia en el reino celestial.

ASÍ COMO EN EL SERVICIO TÍPICO EL SUMO SACERDOTE ponía a un lado sus ropas pontificias, y oficiaba con el blanco vestido de lino del sacerdote común, así Cristo puso a un lado sus ropas reales, fue vestido de humanidad, ofreció sacrificio, siendo él mismo el sacerdote y la víctima. Como el sumo sacerdote, después de realizar su servicio en el lugar santísimo, salía vestido con sus ropas pontificias, a la congregación que esperaba, así Cristo vendrá la segunda vez, cubierto de vestidos tan blancos "que ningún lavador en la tierra los puede hacer tan blancos." (Mar. 9:3.) 

El vendrá en su propia gloria, y en la gloria de su Padre, y toda la hueste angélica lo escoltará en su venida.

ASÍ SE CUMPLIRÁ LA PROMESA DE CRISTO A SUS DISCÍPULOS: "Vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo." (Juan 14:3.) A aquellos que le hayan amado y esperado, los coronará con gloria, honor e inmortalidad. Los justos muertos se levantarán de sus tumbas, y los que estén vivos serán arrebatados con ellos 28 al encuentro del Señor en el aire. 

Oirán la voz de Jesús, más dulce que ninguna música que hayan sentido alguna vez los oídos mortales, diciéndoles: Vuestra guerra ha terminado. "Venid, benditos de mi padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo." (Mat. 25:34). Bien podían los discípulos regocijarse en la esperanza del regreso de su Señor. 29

Los Hechos De Los Apóstoles En La Proclamación

Del Evangelio De Jesucristo. (EGW). MHP